Aqui se pondran los testimonios de las personas que quieran dar a conocer su experiencia personal
Quisiera
volveros a transmitir todo el agradecimiento que llevo
dentro. Ojalá y pudiera haceros sentir toda la felicidad que sentí en
el curso que Javier impartió este pasado mes de julio. No sé por qué,
pero fue increíble el estado de bienestar que mi persona sintió.
Quiero que sepáis que a partir de ese curso, las cosas en mi vida parecen
ir mejor. Lo cierto es que, poco a poco voy cogiendo confianza en mí. Hace unas
semanas sucedió algo que nos dejó perplejos tanto a José, como a mí. Estábamos
acostándonos, cuando a José le entró un dolor muy agudo en el lado derecho del
cuerpo. En vista de que el dolor cada vez era más fuerte, le dije que se
vistiera y que nos fuéramos al hospital. Él quería esperar a ver si se le
pasaba, además, decía que era tan fuerte que no se podía ni mover. Entonces le
puse las manos y, después de unos segundos, me las apartó porque decía que no
podía aguantar el dolor, que al ponerle las manos, el dolor se había intensificado.
No obstante, al cabo de unos segundos más, volví a ponerle de nuevo las manos
y, esta vez sintió menos dolor; un intenso calor y poco a poco empezó a notar
una ligera mejoría hasta que el dolor desapareció prácticamente al 100%. Lo
cierto es que, no sólo me sorprendí yo, sino que también se sorprendió él
porque no encontraba una explicación. Os puedo asegurar que aún sigue alucinando;
sin dar crédito a lo vivido. A partir de ese día, me comenta que va más
veces a orinar, ya que antes apenas orinaba en el día, aunque se hinchara a
beber agua. Esta vivencia me ha dado confianza, y quiero que sepáis que
sigo adelante.
Creo que
empiezo a ver por fin la luz, pero tengo miedo de que otra vez se vuelva
a apagar. Es más, incluso me da miedo comentar que estoy mejorando. Quiero
que sepáis que mis lágrimas no fueron de pena, sino de AGRADECIMIENTO. Ojalá y
pudiera expresar todo lo que sentí. FUE MARAVILLOSO.
Espero que ya os hayáis recuperado del
fin de semana tan intenso i fructífero llevado a cabo. Han sido
sensaciones muy positivas y emocionantes. Me gustaría relataros lo que me
ocurrió cuando llegué a mi casa, después de terminar el curso.
Como sabéis, yo tenía interés en terminar
cuanto antes, porque me esperaban para una comida familiar en la playa. Cuando
llegué y abrí la puerta, tuve la sensación que mi perrito me estaba esperando
e, incluso, vi cómo se salía con el rabo entre las piernas. Empecé a llamarlo y
no obtuve respuesta porque realmente no se encontraba allí, sino en la playa,
pero yo hubiese jurado que estaba allí. El día termino bien, sin más.
A
la mañana siguiente, estaba desayunando en la terraza de la cafetería y
tenía a mi perrito debajo de mi silla. Tres mesas detrás de nosotros, se
encontraba una chica con su perro, atado igual que estaba el mío. Pero de
golpe, oigo jadear a mi perrito y veo aquella bestia que lo estaba degollando.
Empecé a pedir ayuda. La dueña, que se había percatado que se había soltado,
corrió detrás inmediatamente. Poco podíamos hacer, yo lo vi morir en ese
momento, que para mí duró una eternidad. Pero en ese instante, una fuerza
superior me guio a coger el morro de aquella bestia y le hice abrir la boca,
con lo cual soltó a mi perrito y me pilló mi dedo meñique. Todo sucedió tan de
repente: los gritos, los nervios, el pavor de temer lo peor... pues
aquello parecía un baño de sangre.
Dentro de toda esta confusión
alguien dijo: "el perrito no tiene nada, solo una dentada", entonces
me miré y vi que la sangre era mía y mi herida era poca. Me tranquilicé un
poco, me llevaron al médico y al perrito, a la veterinaria. Nos curaron y
hoy puedo dar gracias a Dios, porque la estrategia que usó el perro era para
desnucarlo. O sea, había ido a por él.
¿Mi mente me lo advirtió el
día anterior?. Creo que sí y además, estaba muy cargada de energía. Existen los
milagros!!!
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Queridos amigos:
Puedo confirmar que las cosas de mí
alrededor están cambiando y, por fin, empiezo a ver un hilo de luz muy
esperanzador en mi familia. Pero si he de ser sincera, temo
a imaginar el futuro de manera optimista, ya que mis experiencias
anteriores me han hecho sufrir mucho.
Ahora, después de la Enseñanza,
reflexiono y creo que me precipité y, probablemente, no estábamos preparados
para tanto éxito, por eso no llegó entonces. Tal vez, la soberbia, el orgullo y
la avaricia hubiesen imperado en nuestras vidas y nuestra familia se hubiese
roto. Sencillamente, no era el momento. Ahora lo entiendo.
Considero bueno comentar mi experiencia para que la gente sepa que las casualidades no existen y que muchas veces nos vemos empujados a forjar nuestro destino queramos o no.
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Mi historia es antes de conocer a Javier,
durante mucho tiempo he sentido un vacío, algo que por dentro me decía que la
vida no era esto, que yo tenía que avanzar y no conformarme con mi situación.
Por casualidad he conocido la tienda de Divino
Sabat en Torrente y me comentó que hacían lectura de akásicos. Pensé que igual, en esa sesión sabrían
decirme que era lo que me atormentaba por dentro. Me dijeron que en mi pasado fui ESENIA y que
no comprendían como no me había dedicado a la sanación, porque estaba escrito en
mi libro que ese era mi propósito en esta vida y que debía alcanzarlo. No soy
muy devota a estas cosas y no hice caso.
Pocos días después,
un pájaro blanco, gris y con las patas negras, precioso, comenzó a golpear el
cristal de mi ventana incesantemente. Aunque yo me asomaba y el me veía,
continuaba golpeando la ventana. No entendía que quería, pero yo en el fondo,
sabía que venía por mí, para decirme algo, pero, ¿cómo saber ese algo que era ?. Bajaba la persiana y trataba de que se fuera.
Un día me avisan en
Divino Sabat, que Javier Martos iba hacer
un curso de auto-sanación, que al igual era bueno que asistiera para ver si
llenaba esa sensación. Le dije que asistiría. De pronto, el pájaro dejó de venir a mi ventana pero no
le di importancia, pensé que se habría cansado.
El curso me hizo ver muchas cosas, entender
otras. La primera noche me asusté porque
era consciente de que una voz me hablaba y me decía... ahora que ya puedes
escucharme te voy a decir que es lo que has de hacer: “comienza a quitarte
lastres, cruces que no son tuyas ni te pertenecen, apártate de X persona no te hace
ningún bien y sigue este camino... Me desperté con ansiedad, pero volví asistir
al día siguiente y acabé el curso. Conseguí llenar un poco ese hueco que yo
tenía dentro.
Llegó el momento de
asistir al segundo nivel, y la mente empezó a decirme que no fuera, que para
que, que con el primer nivel bastaba y… ¡sorpresa!, volvió el pájaro a golpear mi ventana. Comencé
a preocuparme por que era algo fuera de lo normal, no le encontraba lógica ni
explicación posible. Asistí al curso de segundo nivel. Durante la meditación
del primer día de pronto volví a
escuchar esa voz diciéndome: “Todavía te queda algún lastre, así no vas a
avanzar. Camina junto al maestro, aprende sus enseñanzas y avanza en este
camino por que tu tienes un gran potencial, ¡aprovéchalo!”. Otra vez la angustia y la ansiedad me invadían.
Al día siguiente no
se porque ni como, pero Javier me cogió aparte junto con otra chica para
hacernos un ''reinicio” (reset). Comencé a llorar sin poder evitarlo, a través
de sus manos me transmitía la paz que yo necesitaba, lloraba de alivio... son
muchos momentos extraños pero que me han hecho ver que debo seguir el camino,
porque si no lo hago, volverá el pájaro…
No le había puesto
las manos a nadie, para curar, ni a mi misma porque me daba mucho respeto, pero
hace varios días que lo estoy haciendo con mucho respeto y amor, dando gracias
siempre por la oportunidad que se me brinda. No es que quite los dolores a 100%,
pero si un 80% y eso me lleva a continuar practicando y aplicando los conocimientos
que Javier nos transmite en el curso.
Doy gracias que lo
pusieran en mi camino y espero poder continuar mi camino con fuerza y empeño
para convertirme en la persona que abandoné en el momento de nacer... recuperar
mi YO SUPREMO.
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